septiembre 16, 2006

La Palma VI. La Caldera, los Roques y sus Muchachos, 9/9/2006

Viaje realizado en Septiembre de 2006. Las fotos llevan una explicación y al relato lo precede un *asterisco. Lo copiado aparece "entrecomillado" Para VER las FOTOS, sus detalles, DEBEN AGRANDARSE clicando sobre ellas. Fueron tomadas con cámara analógica y ahora escaneadas, 25/5/2015. Crónica anterior http://paqquita.blogspot.com.es/2006/09/vuelo-la-palma-v.html

* Estamos en Los Brecitos (1.081 m) a las 10h 5´de la mañana, hora canaria, adonde nos han subido en un 4x4 desde el aparcamiento de la entrada al barranco de las Angustias. El trayecto ha sido de 35´, tal y como nos había anunciado el taxista dicharachero que nos trajo a los 8 que le cubrimos el cupo. El precio: 10 euros -información para interesados- por persona, que bien merecen la pena pagarse porque te sube 800 metros en un recorrido de 11 km, siendo el final de la excursión prevista el aparcamiento del que partimos.
Al Parque Nacional de la Caldera de Taburiente, isla de La Palma, se accede: a) desde aquí, en el pueblo de Los Llanos de Aridane, b) desde el Centro de Visitantes situado en el municipio de El Paso, algo más al este ó c) por el Roque de los Muchachos, al norte, a 2.426 metros de altura, la máxima altitud de la isla.
Es sábado, 9 de septiembre, y hace un día luminoso, el primero y realmente el único de los siete que aquí pasaremos. Iniciamos la bajada hacia lo que llaman "Zona de Acampada", situada en el fondo de la Caldera. Nos acompaña un muchacho de Bilbao y nos anteceden dos gallegos, matrimonio hetero, que residen en Madrid.

33.- Cascada Fondada

* Lo primero que te asombra al entrar en la Caldera de Taburiente es que está poblada de pino canario, es población autóctona y de lo más resistente porque sobrevive a los fuegos, como prueban la mayoría de los árboles que vemos, renegridos en su corteza, quemadas muchas de sus ramas bajas, chamuscadas las más altas, pero... rebrotando, la vida continúa en ellos, poderosa, persistente.
La única dificultad que tiene el moverse por la Caldera, y no es poca, son, las cantidades ingentes de agujas de pino que cubren el suelo.
Considerando que, salvo que estés en la parte más baja, todo son sendas trazadas en la ladera, que recorren un barranco tras otro, o sea, de resbalarte -y las agujas secas de los pinos son resbalosas totales- no paras hasta bien abajo y el cómo salgas será otra historia.
Bien, estamos bajando, el de Bilbao se nos adelanta porque tiene intención de ampliar el recorrido, haciendo uno que le recomendaron unos amigos, interesante y algo peligroso. Nosotros a nuestro truntrún. Nos cruzamos con una pareja, veintipoco y cincuenta y mucho, que llevan el sentido contrario, van de subida, les pregunto, vienen de caza, me asombro ¡sí! ¡de muflones! contestan -no he visto animal alguno salvo aves- dicen que no les veremos que están abajo, que ellos forman parte de una batida y el resto se quedó con las piezas. Eso dicen. Como muestro mi alarma por la matanza, añaden, y más que había que matar porque se comen las flores. El más joven lleva una especie de pértiga en madera y va sudoroso.
 
 34.- Cno. Hoya Verde.
Fondo: Pico de la Cruz (2351m)

* Continuamos, ni rastro de animales, eso quiere decir que ni siquiera veo los excrementos o las huellas. En hora y media estamos en la parte baja. Hay varios carteles indicadores, uno señala: zona de acampada, a la derecha, otro algo más a la izquierda va al Barranco de los Guanches e indica sendero peligroso -es el que tiene que haber tomado el de Bilbao- y un tercero aún más a la izquierda va a la Cascada de la Fondada, la única del parque, la única de la isla -al menos natural, artificial prepararon alguna- y decidimos hacerla. Pues, para arriba. Estamos a 750 metros de altitud.


35.- Más adelante:  Chumbera. Hitos. Senda.
Picos de Piedrallana (2321m) y de la Nieve (2239m)

* En otra hora más llegamos a un Mirador, cartel indicándonos que es de la cascada, la tenemos a nuestra izda., tiene mucha caída, como todo aquí, y poco caudal. También la llaman de los 7 colores, será porque se aprecia el arco iris. La vista es realmente buena, se ve hacia el Pico de la Cruz (2.351 m) y el Pico de Piedrallana (2.321 m), todo murallones.
Llevamos a los gallegos por delante. La pendiente es acusada, pasamos por el Pinar de las 7 fuentes, eso pone, también indica Barranco de las Bombas de Agua, pero el agua que vimos sólo fue el de la cascada mencionada y de lejos. Paso sed. Cosas de la edad, supongo, o que me aguanto menos.
A la una del mediodía salgo del pinar y parece que entro en otro mundo -voy sola, mi compañero va por delante, con la pareja-. Una preciosa pared aparece ante mi vista, insospechadamente, la estrecha senda va pegada a ella, en el camino hay una chumbera y alguna que otra planta baja, que desconozco, porque lo que me parece tomillo no huele.




36.- Barranco de Hoya Verde

* Tiraré alguna foto a los adelantados para que dé más sensación y en media hora estamos todos ya en la Hoya Verde, un barranco con agua del que se nutre la cascada de la Fondada. Altitud: 1.350 metros
Los bejeques = Aeonium virgineum pueblan las rocas. Son a modo de alcachofas muy abiertas y carnosas, verde al principio, que mutan a rosa allí e incluso al ocre. En su ambiente natural crecen en terrenos volcánicos y también se da como planta casera.

37.- Más abajo, a dcha. Grupito. Blas

*  ¡A comer! Buena vista, agua, buen asiento, perfecto.
Al poco oímos algo y aparece una pareja mixta, son de San Sebastián -lo hablaremos más tarde- continúan más arriba y ellos, sí, se meterán en la poza, se les oyen las exclamaciones.



38.- Hacia dentro, Hoya Verde

* El agua está estupenda, de sabor, de temperatura, aún subiremos nosotros dos algo más, poco, porque se cierra con 2 enormes bolos que impiden el acceso a pelo. Hay una pequeña balsa de agua pero no la probaremos.
A las tres menos cuarto, hora canaria, una más en la península, iniciamos la bajada, los gallegos por delante, los donostiarras se quedan comiendo.


39.- Yo misma

Picos de: Piedrallana (2321m)
y de la Nieve (2239m)

* Volvemos a la zona denominada como Playa de Taburiente, el río, antes de la de acampada. Para cruzarlo haré esperar a cuatro jóvenes de los encargados del mantenimiento del parque, será poco, me decido a dar el salto y... ya. Y allí que nos quedamos, yo con las piernas en el agua, mi compañero con todo el cuerpo en el agua ¡le gusta más! y allí estaremos cuando lleguen los de San Sebastián, más valientes que yo también se meten -no sé nadar, debe ser por eso, porque el agua fría del río no me asusta-.

40.- Altos de la Caldera de Taburiente
 

41.- A dcha. ant. Más Altos de la Caldera de Taburiente



42.- A dcha. ant. Pinos canarios = Pinus canariensis

Riscos de la caldera cuyo nombre ignoro.




43.- A dcha. ant

Mirador Roque Idafe

Cumbrecita. Paquita

* Cuando nos parece oportuno a los cuatro seguimos el camino de bajada, hacia el Barranco de Las Angustias.
Pasamos junto a una de las casetas de información del parque, hay allí tres hombres armados con largas pértigas.


44.- Dos lanceros palmeros, Alberto y Tomás

* Les preguntamos si tiene que ver con lo leído sobre el salto de los pastores y, sí, me lo confirman. Ha pasado a ser una modalidad deportiva, recogida por algunos para que no se pierda esa técnica de desplazamiento por la caldera. Y, tan amables ellos, nos explican en qué consiste, a saber: la tal pértiga la llaman Lanza, en lengua nativa Venode, tiene distintas medidas, las que llevan ahora miden alrededor de 3,20 metros y su grosor es más delgado en el extremo superior para ir aumentando progresívamente, llegando hasta los 4,5 cm. -creo recordar- terminando en una punta metálica, están construidas en madera de pino canario y, tras decirnos como se utilizan, nos hacen una demostración subiéndose a la caseta del parque y bajando de ella deslizándose por la lanza, tipo barra d bomberos


45.- Por el camino, lanzándose, Alberto y Esteban

* Boquiabiertos nos dejan, con qué gracilidad lo realizan, nos comentan también que el señor que está sentado junto a la caseta -el guarda- también la utiliza y en esto se une al grupo.
Le preguntamos si supo algo del de Bilbao, sí, dió media vuelta a la hora de irse a la senda comprometida, estaba más fea de lo esperado, sí era él, llevaba una cámara en la mano. Risas, y bromas, "ese no era de Bilbao, ni nada" Buenos son los de Bilbao -por lo de los chistes-.
Aprovecho para consultar una duda al guarda, los fuegos ¿se extinguen solos o los apagan?... contestación: más bien... se extinguen. Lo suponía, apagarlos allí parece casi imposible, hablamos de la resistencia de sus pinos y nos dicen que se están llevando las semillas para repoblar sitios lejanos, precisamente por su fortaleza.


46.- Inmediatamente después. Salto del pastor

* Continuamos todos juntos, a las 7 menos cuarto de la tarde, porque la cháchara ha sido extensa.
Nos cuentan que llevan dando brincos desde las 8 y media de la mañana, nos señalan el recorrido que hicieron, subieron por esa pared, bajaron por aquella, volvieron a subir por la otra, buen ejercicio, sí señor. Donde nosotros hacemos zig zag ellos una recta, comentan que es más útil en bajada que en subida. Pese a ello, en las subida les sirve para no erosionar más el terreno, cuando está descompuesto, como mucho del que estamos atravesando, apoyan la lanza en el suelo y suben los pies, no agarrándose en momento alguno a la roca, cosa que, además, evita que se les quede en las manos y puedan caerse. Vamos, que es menos agresivo que la escalada y trepada convencional. En 15 días se pueden aprender los rudimentos básicos, eso dicen. Aclaran que no se atreven con todo, que el Roque Liso y el Roque del Diablo son casi inexpugnables para ellos, todavía. Los pastores, ellos, sí sabían.
Esteban, de 38 años, lleva desde los 10 practicando. Alberto empezó hace 10 y tiene 30 años. Y Tomás, el saber enciclopédico del grupo, tiene 48 y lleva... no sé cuantos lleva, pero tiene una agilidad y suavidad al moverse con ella que hasta puede parecer fácil.
Nos señalan el Roque Idafe, reverenciado por los indígenas de la isla, y al que rendían tributo. Dicen que pensaban que caso de caerse él, se hundiría la isla.


47.- Cascada colorista. Mal enfoque

Alberto, Tomás, JuanCarlos, Amaya y Esteban.


48.- Grupo. Barranco de las Rivanceras


* En la información que llevamos habla de una cascada ferruginosa en el camino, planteamos de pasarnos a verla, supone 20´ más de ida y otros tantos de vuelta, entre que sí y que no, vamos.
El agua del Barranco de las Rivanceras lleva el color anaranjado por las sales de hierro que tiene disueltas, es precioso su color, la cascada que veremos es... artificial, de obra... humana. Para acceder a ella habremos hecho un paso por la pared algo complicado, si no se quieren complicaciones, se puede uno descalzar y pasar por el río.

 49.- Geiser

* Al poco de salir del barranco nos llevan a un géiser, pequeño, sin subida, pero se nota el borbotear del agua al aflorar a la superficie del suelo, su sabor, asqueroso, bueno, no tanto, pero agradable, no. Cerca una especie de cabaña vegetal teñida por el color de las aguas, Esteban me recomienda foto, pues foto.


50.- Cueva vegetal, teñida de óxido férrico

* Cruzamos el río Taburiente por ¿donde dios nos da a entender? no, donde dicen ellos. Ya todo es bajada por el Barranco de Las Angustias, nos mencionan que hace algunos años, una tormenta arrastró a unos alemanes que por él bajaban -aparecieron en el mar-. Casi todo el rato es por el cauce mismo, se me hace largo, cuando creo que estamos acabando, queda aún más de una hora.


51.- Lavas almohadilladas. Barranco de las Angustias

* Es realmente fatigosa esta parte del recorrido, también influirá el tiempo que llevamos encima. Unos bolos enormes, rocas, en medio, tienen formas curiosas, son las lavas almohadilladas = lava acojinada, consecuencia de las erupciones volcánicas en los fondos marinos, ahora en superficie.
Al aparcamiento llegamos a las 21 horas, hora insular. Ya está anochecido.
Vendrá Esther, mujer de Esteban a recogerlos, y a sus lanzas enormes, y todos juntos a Los Llanos, a tomar unas cervezas, merecidas, ansiadas, estupendas.

GRACIAS a mis 3 palmeros lanceros por su generosidad al acompañarnos y a Juan Carlos y Amaya por su saber estar, saber tratar. Besos y abrazos para todos vosotros.
Ah, y disfrutad durante vuestra estancia y exhibición en Verona.

Crónica siguiente http://paqquita.blogspot.com.es/2006/09/vuelo-la-palma-vi.html

PAQUITA

1 comentario:

Anónimo dijo...

Entrañable cronista viajera que nos vas a deleitar con nuevas descripciones. Plantéate tu trabajo; creo que vales para que ningún detalle de tus viajes se quede en el tintero.
Besos,